Entre olivares y montañas se encuentra Cazorla, encantadora localidad de Jaén conocida por su aceite Denominación de Origen y por ser una de las entradas al Parque Natural de la Sierra de Cazorla, Segura y las Villas, uno de los más extensos de Europa.
Cosas que hacer en Cazorla
Merece la pena dar un pasero por las calles empinadas del casco antiguo de Cazorla, declarado Bien de Interés Cultural, y descubrir sus casas nobles y sus viviendas tradicionales. Fíjate en los emblemáticos detalles que protegen las entradas de algunas casas, unas minúsculas capillas llamadas hornacinas. La más popular es la gran Hornacina del Cristo del Valle, que tiene hasta su propia fiesta.
El Ayuntamiento de Cazorla, junto con el Teatro Municipal y los Juzgados, se encuentra en un antiguo edificio de la Orden de la Merced, del s. XVI y de estilo renacentista, formado por una antigua iglesia y un convento. Pero el símbolo más representativo de Cazorla es el Castillo de la Yedra, un antiguo enclave defensivo situado a los pies del cerro de Salvatierra y que hoy en día alberga la sede del Museo de Artes y Costumbres Populares del Alto Guadalquivir. Es especialmente fascinante contemplarlo iluminado por la noche.
Y si te gusta la naturaleza y las actividades al aire libre, no puedes dejar de visitar el Parque Natural de la Sierra de Cazorla, Segura y las Villas, considerado el espacio protegido de mayor extensión en España y declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO. Cuenta con una amplia red de senderos y rutas que se pueden recorrer a pie, en bicicleta o en todoterreno. Además, también se pueden realizar deportes acuáticos en el pantano y en algunos de los cursos fluviales.
Cómo moverse por Cazorla
Cazorla se puede recorrer tranquilamente a pie, y para visitar el parque o las poblaciones de los alrededores hay un servicio de autobuses disponible, además de taxis. La estación de tren más cercana e importante es la de Linares-Baeza, y el aeropuerto de Granada-Jaén y el de Córdoba se encuentran en ambos casos a unas 2 h de distancia.