Esta ciudad castellana rebosa historia y buena mesa. Aunque la talla de la ciudad es pequeña, su cercanía a Madrid y su aclamada muralla la han convertido en una parada imprescindible por las tierras de Castilla y León.
Cosas que hacer en Ávila de los Caballeros
Ávila es una ciudad pequeña pero inmensamente rica en historia; la lista de palacios, conventos, iglesias y otros monumentos que visitar en su casco antiguo es interminable. Si hay un hito que no te puedes perder es su magnífica muralla, el recinto amurallado medieval mejor conservado del mundo, y su catedral, considerada la primera catedral gótica de España y un ejemplo de templo-fortaleza integrado en la muralla.
Cuando te canses de recorrer sus callejuelas y plazas, y el cuerpo te pida otra cosa que no sean portones medievales y fachadas barrocas, será imprescindible degustar un famoso chuletón de Ávila, con indicación geográfica protegida, y para los más golosos, las yemas de Santa Teresa serán un capricho inolvidable.
Para terminar, merece la pena cruzar el río y subir hasta el lugar conocido como Los Cuatro Postes, una pequeña ermita de la que solo quedan cuatro columnas dóricas, de ahí su denominación popular. Es un mirador magnífico desde el que disfrutar de unas preciosas vistas de la ciudad, especialmente cuando, al atardecer, se iluminan las murallas de la ciudad.
Cómo moverse por Ávila de los Caballeros
Pasear por la ciudad es lo más cómodo y la opción más popular entre los viajeros, así que es mejor olvidarse del coche. Para llegar desde otras ciudades, su cercanía a Madrid hace que el acceso en tren sea muy rápido desde la capital española.