Dubái es la ciudad de lo superlativo, con sus colosales atracciones, su deslumbrante metrópolis, las aguas azules del golfo Pérsico y las arenas de un desierto en apariencia interminable. Como joya futurista del Oriente Medio, Dubái es un destino multicultural que mima a las familias en parques temáticos, a los aventureros en safaris por el desierto, a los más urbanitas con gigantescos centros comerciales y a los comidistas con una gastronomía deliciosa. Hogar de profundas tradiciones e historia, Dubái es mucho más que su brillante horizonte y merece la pena explorarlo a fondo.
Cosas que hacer en Dubái
El Burj Khalifa es lo más destacado de cualquier viaje a Dubái. Ve directamente al rascacielos de 830 metros para descubrir las increíbles vistas de la silueta siempre cambiante de la ciudad. Adéntrate en sus tradiciones más arraigadas paseando por Bur Dubai entre las antiguas casas árabes de este distrito histórico frente al mar.
Dubái es también el paraíso de las compras, con un gran abanico de tiendas antiguas y nuevas, desde boutiques de lujo, que puedes encontrar en el mayor centro comercial, el Dubai Mall, hasta los joviales vendedores de los zocos, como el de especias y el de oro, situados en la parte este de la ciudad.
Desde la belleza natural del desierto árabe hasta los opulentos rascacielos de Sheikh Zayed Road y las singulares islas artificiales Palm, Dubái ofrece una variedad inaudita de vistas inolvidables; en sus infinitos días estivales, es un lugar privilegiado para deleitarse con cócteles exóticos y vinos internacionales en glamurosas terrazas con unas vistas del océano que arrebatan el aliento.
¿Siempre has soñado con embarcarte en un emocionante safari por el desierto? No dudes en hacer un viaje nocturno irrepetible a través de las dunas del desierto árabe haciendo dune bashing. También puedes visitar la famosa gran mezquita Sheikh Zayed en una excursión a la capital de los Emiratos Árabes, Abu Dabi, a solo una hora y media en autobús.
Cómo moverse por Dubái
El tráfico de Dubái puede ser intenso a veces, así que el metro es la mejor forma de moverse por la ciudad. Los trenes del metro no tienen conductores, pero sí grandes ventanas para disfrutar de las vistas y vagones de primera clase. Es fácil de utilizar y conecta con los principales puntos de interés de la ciudad, como el Burj Khalifa, el puerto deportivo de Dubái y el Burj Al Arab, además de ofrecer transporte directo desde el aeropuerto. Y para una visión única de la ciudad, sube a bordo de un tradicional taxi acuático en la ría de Dubái.