Es un hotel muy grande, es muy fácil perderse en él. Las calefacciones estaban muy altas y no se podían regular. El baño estaba pasable, no estaba impecable, pero estaba limpio (lo justo). Las camas son algo duras pero se duerme bien, aunque dos noches tuve que volver hacer mi cama ya que estaba desecha por los pies. Eñ desayuno lo peor con gran diferencia. Variedad muy escasa y lo poco que había dejaba que desear. Solo habia tostadas, mantequilla, mermeladas, leche, cereales, zumos, café y 2 tipos de frutas. Las tostadas frías,blandas y poco tostadas, la mantequilla bastante buena al igual que las mermeladas, los cereales también estaban bien (los 4), el zumo de naranja es lo más asqueroso que he probado encon mi vida, parecía zumo de naranja o algo parecido mezclado con mucha agua (no tenia sabor a naranja), leche... no la pude probar, ya que no tomo nunca leche sola, pero no había ni colacao, ni nesquik ni nada de chocolate para poner en la leche. El café, sigo dudando que fuera café. La fruta, habia unos gajos amarillos (sin nombre) y gajos de naranja incomibles de lo amargos y secos que estaban. Encima hay que pagar un plus para comer unos simples huevos revueltos o salchichas o huevo frito. Al final compramos embutidos para poner en el pan que entraba en el desayuno ya que era imposible comer o beber la mitad de las cosas.