Arrecife, capital de la isla de Lanzarote, es una tranquila y pintoresca ciudad portuaria de arraigada tradición marinera. Sus encantadores barrios de casas blancas se mezclan con concurridas calles comerciales, interesantes monumentos históricos y auténticos restaurantes de comida isleña.
Cosas que hacer en Arrecife
Arrecife cuenta con dos castillos defensivos construidos para proteger la ciudad de los asaltos piratas. El castillo de San Gabriel, del s. XVI, se erige en un islote frente a la costa de la ciudad y podrás acceder a él a través del Puente de las Bolas. No muy lejos, se encuentra también el castillo de San José, sede hoy en día del Museo Internacional de Arte Contemporáneo, y que alberga en su interior obras de artistas como Picasso, Tàpies, Miró y Chillida.
Si lo que quieres es tumbarte en la playa y disfrutar de las cálidas temperaturas canarias dirígete a la playa del Reducto, un bonito arenal rodeado de peñascos e islotes. Aquí también podrás realizar actividades acuáticas, como windsurf, vela, kayak o esnórquel.
La Puntilla es un pequeño y humilde barrio de pescadores en el que se respira historia y tranquilidad. Aquí se levanta la Parroquia de San Ginés, magnífico ejemplo de mudéjar canario, y el emblemático Charco de San Ginés, un encantador lago de agua de mar que se adentra en la ciudad y en el que se balancean pequeños barcos de pescadores. La avenida que lo rodea es el sitio ideal para dar un paseo y terminar sentándose a degustar la comida local contemplando el espectacular atardecer de la isla.
Cómo moverse por Arrecife
Arrecife se puede recorrer a pie, y dispones de autobuses que conectan con otras localidades y con el aeropuerto de Lanzarote, a unos 10 minutos de Arrecife. Si quieres visitar la isla a tu aire es recomendable alquilar un coche.